Saturday 13 February 2010

VI DOMINGO ORDINARIO


AÑO -C-
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS 6, 17, 20-26
En aquel tiempo, bajo Jesús del monte con los Doce y se paró en un llano con un grupo grande de discípulos y de pueblo, procedentes de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón. Él, levantando los ojos hacía sus discípulos, les dijo:

--Dichosos los pobres, porque vuestro es el Reino de Dios.
Dichosos los que ahora tenéis hambre, porque quedaréis saciados.
Dichosos los que ahora lloráis, porque reiréis.
Dichosos vosotros cuando os odien los hombres, y os excluyan, y os insulten y proscriban vuestro nombre como infame, por causa del Hijo del Hombre.
Alegraos ese día y saltad de gozo; porque vuestra recompensa será grande en el cielo. Eso es lo que hacían vuestros padres con los profetas.
Pero, ¡ay de vosotros, los ricos, porque ya tenéis vuestro consuelo!
¡Ay de vosotros, los que estáis saciados, porque tendréis hambre!
¡Ay de los que ahora reís, porque haréis duelo y lloraréis! ¡Ay si todo el mundo habla bien de vosotros! Eso es lo que hacían vuestros padres con los falsos profetas.

Nota.

En los salmos y en la literatura sapiencial en general, se considera bienaventurada a una persona que cumple fielmente la ley.
Con las bienaventuranzas, Jesús nos invita a dar un paso más en nuestro compromiso como discípulos suyos, que buscamos ser.
Los pobres de los que nos habla San Lucas son los verdaderos pobres, los que no tienen nada, los olvidados de la sociedad de todas las épocas, aquellos que los gobiernos y políticos buscan esconder en las grandes fiestas o visitas de los Papas, paradójicamente. Pues en algún rincón de la conciencia saben éstos, que no hacen lo necesario y que sus leyes excluyen a personas y las marginan.

Jesús pone su atención en la persona, en el que sufre y no en el cumplimiento de la ley, es lo que podemos deducir de la atención especial en las diferencias sociales que Lucas suele poner en los diferentes pasajes de su evangelio. Preocupación por la pobreza; pero seguramente expresión de una realidad de la comunidad de su época, en la que él vive.

Los pobres son los que Dios ha escogido con especial atención, pues son los que sufren las desigualdades e injusticias de los hombres; también porque ellos ponen su confianza en el “Señor que todo lo puede”. Su corazón es dócil al llamado de Dios. Con esto no queremos decir; que debemos generar pobreza o mantenerla; pues ésta atenta contra la dignidad del ser humano, además, de ser una vergüenza para la humanidad y todos los sistemas sociales.
Preguntémonos esta semana, si los pobres tienen lugar en el presupuesto mensual de mi familia!

No comments: