Friday 5 November 2010

XXXII Domingo T. Ordinario C

Domingo 07 de noviembre del 2010

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS

20, 27-38


En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos saduceos, que niegan la resurrección, y le preguntaron:
-- Maestro, Moisés nos dejó escrito: Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero sin hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano. Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos. Y el segundo y el tercero se casaron con ella, y así los siete murieron sin dejar hijos. Por último murió la mujer. Cuando llegue la resurrección, ¿de cuál de ellos será la mujer? Porque los siete han estado casados con ella.
Jesús les contestó:


-- En esta vida, hombres y mujeres se casan; pero los que sean juzgados dignos de la vida futura y de la resurrección de entre los muertos no se casarán. Pues ya no pueden morir, son como ángeles; son hijos de Dios, porque participan en la resurrección. Y que resucitan los muertos, el mismo Moisés lo indica en el episodio de la zarza, cuando llama al Señor "Dios de Abrahán, Dios de Isaac, Dios de Jacob". No es Dios de muertos, sino de vivos; porque para él todos están vivos.

Nota.
“Dios de Abrahán; Dios de Isaac, Dios de Jacob. No es un Dios de muertos; sino de vivos.”
La idea de la resurrección era un tema reciente en el tiempo de Jesús, pues sólo se había desarrollado hacia el año 200 antes de Jesucristo. Los fariseos estaban convencidos de la resurrección de los muertos, aunque con la convicción de una continuidad de la realidad terrestre.
Por su parte, los Saduceos creían en los cinco primeros libros de la biblia donde no se habla del tema.
Este era el conflicto de los dos grupos en que estaba dividido el pueblo.
Los fariseos aunque creían en la resurrección, su visión era muy materialista; pues se la imaginaban como un regreso de los muertos a la vida sobre la tierra, por lo tanto encerrada en el tiempo y en el espacio.

Jesús cuando dice: “… Que los que sean juzgados dignos de la vida futura y de la resurrección de entre los muertos no se casarán”.
Con esta afirmación, Jesús nos está empujando hacia una nueva visión de nuestra vida, donde debemos aceptar otra dimensión de nuestra existencia, de la cual no tenemos idea; pero para la cual tenemos que dar el salto de la fe. Un salto seguro si pensamos en el amor de Dios que atraviesa las fronteras de la muerte, un amor que no olvida sus promesas; por que como dice San Agustin: “No podemos olvidar a quien amamos, si lo amamos en aquél que no puede olvidarnos”.

Más aún; “Nuestros amores humanos en esta tierra no pueden morir, pues ellos son la imagen de Dios; son aquello que en nuestro interior, tenemos de Dios”. Nos dice Marie Noëlle Thabut.

Friday 29 October 2010

XXXI Domingo T. Ordinario -C-


31 de Octubre del 2010
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS
19, 1-10

En aquel tiempo, entró Jesús en Jericó y atravesaba la ciudad. Un hombre llamado Zaqueo, jefe de publicanos y rico, trataba de distinguir quien era Jesús, pero la gente se lo impedía porque era de bajo de estatura. Corrió más adelante y se subió a una higuera para verlo, porque tenía que pasar por allí. Jesús, al llegar a aquel sitio, levantó los ojos y dijo:

--Zaqueo, baja en seguida, porque hoy tengo que alojarme en tu casa.
Él bajó en seguida, y lo recibió muy contento. Al ver esto, todos murmuraban
diciendo:

--Ha entrado a hospedarse en casa de un pecador.
Pero Zaqueo se puso en pie, y dijo al Señor.
--Mira, la mitad de mis bienes, Señor, se la doy a los pobres; y si de alguno me he aprovechado, le restituiré cuatro veces más.
Jesús contestó:

--Hoy ha sido la salvación de esta casa; también éste es hijo de Abrahán. Porque el Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido.
Nota.
El evangelio nos revela una actitud cristiana necesaría para crecer en el conocimiento del Señor: Buscarlo.
Jesús acepta todas las personas; las busca constantemente, no hace distinción como solemos hacerlo nosotros, el "vino por a buscar y a salvar lo que estaba perdido".
En esta parte del evangelio, San Lucas nos muestra una vez más el rostro de un Dios preocupado de la suerte y felicidad de la humanidad. El Dios del amor, de la paciencia y de la misericordia. El Dios amoroso que respeta nuestra vida y circunstancias.
El Dios de Jesucristo que nos revela hoy San Lucas, es el que estamos llamados a reconocer en nuestro interior, allí en lo más profundo de nosotros...
Para que nuestra vida se transforme, debemos buscarlo, poner todo nuestro empeño en ese encuentro que cambiará nuestra vida. Un encuentro que nos hará despojarnos de todas las falsas seguridades con las que vivimos y las que nos impiden comprometernos de verdad en la empresa de la construcción de un mundo más justo y en paz.
Amílcar Ferro B. mxy

Saturday 2 October 2010

XXVII DOMINGO T. ORDINARIO-C-

Lucas 17, 5-10
¡Si tuvierais fe ... !

En aquel tiempo, los apóstoles le pidieron al Señor: "Auméntanos la fe." El Señor contestó: "Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera: "Arráncate de raíz y plántate en el mar." Y os obedecería. Suponed que un criado vuestro trabaja como labrador o como pastor; cuando vuelve del campo, ¿quién de vosotros le dice:
"En seguida, ven y ponte a la mesa"? ¿No le diréis:
'Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo, y después comerás y beberás tú"? ¿Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado? Lo mismo vosotros: cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid: "Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer.""
NOTA

Los apóstoles le piden a Jésus: “¡Aumenta nuestra fe!” (v. 5).

En el contexto del mundo actual, el cristiano tiene un gran desafío; mostrar los frutos de su fe. Vivir como discípulos de Jesús implica un estilo de vida, unos valores. La fe es un actitud frente a la vida, que la va transformando, siguiedo al Señor; respondiendo al llamado que nos ha hecho, que nos hace en cada instante de nuestra vida.

Por eso la respuesta del Señor “Si tuvierais fe como un granito de mostaza, ….” Es decir no es la cantidad sino los frutos que ella produce al exterior, su fuerza transformadora, el cambio que ejerce en el mundo. La fe se nos ha dado para ganar las apuestas más inesperadas y áridas de la vida; como la comparación de la semilla de mostaza, la más pequeña de todas, con el árbol más fuerte transplantado de un solo cuájo en el mar.
Las aguas del mar, son un lugar hostíl y desertico, sin vida.
El árbol platado en el mar singnifica la victoria de la vida sobre la muerte. Promesa de fecundidad en los lugares más inesperados.
Amílcar Ferro B. mxy

Sunday 26 September 2010

XXVI Domingo del T. Ordinario- C-



Evangelio según San Lucas

16, 19-31


Recibiste bienes y Lázaro males: por eso encuentra aquí consuelo, mientras que tú padeces


En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos: "Había un hombre rico que se vestía de purpura y de lino y banqueteaba espléndidamente cada día.
Y un mendigo llamado Lázaro estaba echado en su portal, cubierto de llagas, y con ganas de saciarse de lo que tiraban de la mesa del rico.


Y hasta los perros se le acercaban a lamerle las llagas.
Sucedió que se murió el mendigo, y los ángeles lo llevaron al seno de Abrahán.
Se murió también el rico, y lo enterraron. Y, estando en el infierno, en medio de los tormentos, levantando los ojos, vio de lejos a Abrahán, y a Lázaro en su seno, y gritó:
"Padre Abrahán, ten piedad de mí y manda a Lázaro que moje en agua la punta del dedo y me refresque la lengua, porque me torturan estas llamas. "


Pero Abrahán le contestó: "Hijo, recuerda que recibiste tus bienes en vida, y Lázaro, a su vez, males: por eso encuentra aquí consuelo, mientras que tú padeces.
Y además, entre nosotros y vosotros se abre un abismo inmenso, para que no puedan cruzar, aunque quieran, desde aquí hacia vosotros, ni puedan pasar de ahí hasta nosotros."
El rico insistió: "Te ruego, entonces, padre, que mandes a Lázaro a casa de mi padre, porque tengo cinco hermanos, para que, con su testimonio, evites que vengan también ellos a este lugar de tormento."
Abrahán le dice: "Tienen a Moisés y a los profetas; que los escuchen."
El rico contestó: "No, padre Abrahán. Pero si un muerto va a verlos, se arrepentirán.
Abrahán le dijo: "Si no escuchan a Moisés y a los profetas, no harán caso ni aunque resucite un muerto.""
Nota.
El evangelio de hoy, lejos de decirnos la suerte que vamos a correr tras la muerte, nos hace tomar conciencia del sueño de Dios para la humanidad, la fraternidad entre los hombre, el Papa pablo VI decía: "Todo hombre es mi hermano".
La liturgia entonces nos hace pensar en los 8 objetivos, a alcanzar hacia el 2015, trazados por las Naciones Unidas al inicio de este milenio; ellos son:

Al comienzo de este milenio, con ocasión de la primera reunión de la asamblea general de las naciones unidas los jefes de estado de 189 países, firmaron la declaración solemne para el nuevo milenio, teniendo en cuenta 8 objetivos fundamentales que la comunidad internacional quiere llevar a cabo antes del 2015

1. Reducir la extrema pobreza y el hambre
2. Educación primaria para todos;
3. Promover la igualdad de género y la autonomía de la mujer;
4. Reducir la mortalidad infantil;
5. Mejorar la salud materno infantil;
6. Combatir el VHI/Sida, el paludismo y otras enfermedades;
7. Trabajar para un medio ambiente duradero
8. Crear un sistema mundial para el desarrollo

Saturday 4 September 2010

XXIII DOMINGO DEL T. ORDINARIO -C-


05 septiembre 2010
Evangelio de San Lucas
14,25-33

El que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío
En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo: "Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer y a sus hijos, y a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío.
Quien no lleve su cruz detrás de mí no puede ser discípulo mío.

Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla?

No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo: "Este hombre empezó a construir y no ha sido capaz de acabar."
¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil?

Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz. Lo mismo
vosotros: el que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío."
Nota.
El evangelio de hoy, nos invita a reflexionar sobre tres exigencias fundamentales para todo discípulo; éstas están al final del camino de un largo seguimiento, no debemos perderlas de vista, debemos tener la mirada fija; pero no deben asustarnos, sino por el contrario; ayudarnos a vivir en plena libertad.

1. "Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer…
La familia es muy importante en la vida de los seres humanos; por lo tanto, dejarla no es lo que nos propone Jesús; sería algo contrario a la invitación del amor a la que nos llama. Jesús nos propone unos valores que, si pasan por la familia; no se quedan atrapados en ella. Nos invita ser capaces de dedicar toda nuestra vida a la causa del Reino, ser portadores de felicidad a otros, nuestra entrega debe ser signo de la presencia del Reino ente nosotros.

2. “Quien no lleve su cruz detrás de mí no puede ser discípulo mío”.
Las decisiones en la vida comportan riesgos, que debemos asumir, pero con la certeza de que no estamos solos, la gracia de Dios nos acompaña.
Les dificultades para vivir unidos al Señor, no deben hacernos desistir, sino ayudarnos a mirar nuestra vocación de cristianos con otros ojos, todo adquiere sentido cuando nos sentamos a calcular… Todo adquiere otro color cuando nos arrodillamos en oración.

3. “Lo mismo vosotros: el que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío."
Saber renunciar en la vida a unas cosas, para quedarnos con la mejor parte, es la condición de los seguidores de Jesús.
Tenemos tendencias a aferrarnos a cosas, personas, recuerdos, dinero… Quien pone su confianza en el Señor, quien se funde en su amor, ese podríamos decir es discípulo de Jesús.
Podemos entender que Jesús nos invita a no contar con más fuerzas que las suyas propias, es decir con su gracia; para la obra a la que nos llama.
Amílcar Ferro B. mxy




Sunday 29 August 2010

XXII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO -C-


Bruselas, domingo 29 de agosto del 2010



Lectura del santo evangelio según san Lucas

14, 1. 7-14


Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando.
Notando que los convidados escogían los primeros puestos, les propuso esta parábola: "Cuando te conviden a una boda, no te sientes en el puesto principal, no sea que hayan convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que os convidó a ti y al otro y te dirá:

"Cédele el puesto a éste."


Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último puesto.
Al revés, cuando te conviden, vete a sentarte en el último puesto, para que, cuando venga el que te convidó, te diga: "Amigo, sube más arriba."


Entonces quedarás muy bien ante todos los comensales.
Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido."
Y dijo al que lo había invitado: "Cuando des una comida o una cena, no invites a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos; porque corresponderán invitándote, y quedarás pagado.


Cuando des un banquete, invita a pobres, lisiados, cojos y ciegos; dichoso tú, porque no pueden pagarte; te pagarán cuando resuciten los justos."
Nota.
"...Dichoso tú, porque no pueden pagarte..."
Hermanos y amigos, este domingo podríamos pensar en una novena bienaventuranza, "dichoso tú, porque no pueden pagarte..."
Jesús en el evangelio de hoy, nos recuerda "la opción preferencial por el pobre", su propia opción y la de todos aquellos que quieran ser sus discípulos. Muchos esfuerzos se han hecho y se hacen en todo el mundo para solucionar el problema de los pobres; pero el primero debe estar en nuestro corazón; darle el lugar que merece, la preocupación constante, acompañada de gestos concretos en nuestra vida diaria en su favor.
Si le damos el primer lugar en nuestro corazón, encontraremos soluciones a la pobreza en el mundo, de lo contrario, continuaremos a mantenerla.
En muchos lugares de la tierra, millones de personas viven en la miseria, sin techo, sin educación, sin trabajo; sin alimento; lo más triste, sin esperanzas de un mañana mejor.
Es la hora hermanos, de rezar el padre nuestro de verdad: "...Danos el pan de cada día..."
Hay muchos cristianos insensibles, con muchas posibilidades para ayudar y no lo hacen; con poder para buscar sistemas económicos más humanos y cállan por comodidad y falta de compromiso; o por miedo.
La invitación es para que esta semana, hagamos una acción en favor de los más pobres.
Amílcar FERRO B. mxy

Saturday 21 August 2010

XXI DOMINGO T. ORDINARIO -C-

Lucas 13, 22-30

Vendrán de oriente y occidente y se sentarán a la mesa en el reino de Dios
En aquel tiempo, Jesús, de camino hacia Jerusalén, recorría ciudades y aldeas enseñando.
Uno le preguntó: "Señor, ¿serán pocos los que se salven?"

Jesús les dijo: "Esforzaos en entrar por la puerta estrecha. Os digo que muchos intentarán entrar y no podrán. Cuando el amo de la casa se levante y cierre la puerta, os quedaréis fuera y llamaréis a la puerta, diciendo: "Señor, ábrenos";
y él os replicará: "No sé quiénes sois."

Entonces comenzaréis a decir.
"Hemos comido y bebido contigo, y tú has enseñado en nuestras plazas."
Pero él os replicará:
"No sé quiénes sois. Alejaos de mí, malvados."

Entonces será el llanto y el rechinar de dientes, cuando veáis a Abrahán, Isaac y Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, y vosotros os veáis echados fuera. Y vendrán de oriente y occidente, del norte y del sur, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios.
Mirad: hay últimos que serán primeros, y primeros que serán últimos."
Nota.
El evangelio de Sn Lucas, desde hace ya varios meses, continúa a darnos el mensaje de Jesús, durante su camino hacia Jerusalén; camino más teológico que geográfico; es decir, Jesús camina hacia el lugar del cumplimiento de su misión; la cruz: pasión, muerte y resurrección.

Es en este contexto; y en el de una comunidad regida por la ley, segura de la salvación, por el hecho de pertenecer a un grupo religioso. No olvidemos que su auditorio es el pueblo judío; Jesús nos hace una nueva invitación este domingo.

Los cristianos de hoy, podemos correr el riesgo de pensar, que por el hecho de estar bautizados y participar de algunos sacramentos; tenemos la salvación asegurada:
"Hemos comido y bebido contigo, y tú has enseñado en nuestras plazas."

Pero el Señor nos responderá: "No sé quiénes sois. Alejaos de mí, malvados."

Son palabras duras, podríamos pensar que ese no es nuestro Dios de misericordia; pero es el mismo Dios del amor; el gran pedagogo que nos invita a mirar nuevos horizontes, a una mirada más amplia.
Jesús nos invita hoy a dar el paso, con toda libertad; a buscarlo, encontrarlo, a conocerlo y amarlo; a abrirle nuestro corazón para que se funda con el suyo, para que amemos como Él; para que hagamos su voluntad; para que hagamos el bien a nuestros hermanos y hermanas.
¿Estamos listos para amar?
Esta invitación es universal:
“…Y vendrán de oriente y occidente, del norte y del sur, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios. ”
Nuestro compromiso hoy como cristianos, en el anuncio del evangelio a toda la humanidad; debe hacerse desde nuestro testimonio de vida; erforzándonos en entrar por la puerta de la exigencia de los valores cristianos.
Disculpas.
Mil disculpas por este tiempo de ausencia, ajeno a mi voluntad.

Sunday 27 June 2010

XIII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO


Domingo 27 de junio del 2010



Lucas 9, 51-62


Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Te seguiré adonde vayas
Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante.
De camino, entraron en una aldea de Samaria para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén.


Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: "Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?"
Él se volvió y les regañó. Y se marcharon a otra aldea.
Mientras iban de camino, le dijo uno: "Te seguiré adonde vayas."
Jesús le respondió: "Las zorras tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza."


A otro le dijo: "Sígueme."
Él respondió: "Déjame primero ir a enterrar a mi padre."


Le contestó: "Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el reino de Dios."
Otro le dijo: "Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia."
Jesús le contestó: "El que echa mano al arado y sigue mirando atrás no vale para el reino de Dios."

Saturday 15 May 2010

VII DOMINGO DE PASCUA


FIESTA DE LA ASCENSION DEL SEÑOR



LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS


24, 46-53


En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos:


-- Así estaba escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre predicará la conversión y el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. Y vosotros sois testigos de esto. Yo os enviaré lo que mi Padre ha prometido; vosotros quedaos en la ciudad, hasta que os revistáis de la fuerza de lo alto.


Después los sacó hacia Betania, y levantando las manos los bendijo. Y mientras los bendecía, se separó de ellos (subiendo hacia el cielo) Ellos se volvieron a Jerusalén con gran alegría; y estaban siempre en el templo bendiciendo a Dios.



Nota.

El evangelio de Sn Juan nos invita en esta fiesta de la Ascensión del Señor, a ser testigos del amor de Dios en el mundo.
El testigo conoce a la persona de quien da testimonio. Tarea diaria del cristiano de hoy: Conocer a Jesús, descubrirlo en los rostros humanos, en el rostro de los que sufren... En el rostro de todos aquellos que trabajan por la justicia y la paz.

Que nuestro estilo de vida, sea testigo del amor sin límites de Dios por cada uno de nosotros.
Como la flor que anuncia la primavera, nuestros rostros reflen la ternura de Dios por nosotros.

Amílcar Ferro B mxy

Saturday 8 May 2010

VI DOMINGO DE PASCUA


LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN

14, 23-29


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:


-- El que me ama guardará mi palabra y mi padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él. El que no me ama no guardará mis palabras. Y la palabra que estáis oyendo no es la mía, sino del Padre que me envió. Os he hablado ahora que estoy a vuestro lado; pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que enviará el Padre en mi nombre, será quien os lo enseñe todo y os vaya recordando todo lo que os he dicho.

La Paz os dejo, mi Paz os doy:

No os la doy como la da el mundo. Que no tiemble vuestro corazón ni se acobarde. Me habéis oído decir "Me voy y vuelvo a vuestro lado." Si me amarais os alegraríais de que me vaya al Padre, porque el Padre es más que yo. Os lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda, sigáis creyendo.
Nota.
San Juan, nos recuerda que el amor es un don de Dios, dado a todo ser humano. Ese amor nos empuja a mantenernos unidos al Señor, cada vez que somos capaces de expresar nuestro amor a los hermanos en actos concretos de solidaridad y respeto.
Ese amor que nos mantiene unidos al Señor, permite la llegada del Espiritu Santo que guía nuestros pasos y los de la Iglesia. Que muestra en los signos de los tiempos la presencia y la voluntad de Dios para nosotros.
Jesús sigue actuando en el mundo en sus discípulos, en la historia, en los hombres y mujeres de buena voluntad.

Tuesday 20 April 2010

IV DOMINGO DE PASCUA


LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN

10, 27-30


En aquel tiempo, dijo Jesús:
-- Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre y nadie las arrebatará de mi mano.
Mi Padre, que me las ha dado, supera a todos y nadie puede arrebatarlas de la mano de mi Padre.
Yo y el Padre somos uno.
Nota.
-Como el buen Pastor, Dios cuida de nosotros, sobre todo, en los mementos más difíciles de nuestra vida.

-Como el buen Pastor, Dios sale a nuestro camino por senderos inhóspitos.
-Como el buen Pastor, Dios no nos deja solos cuando los fenómenos de la naturaleza nos muestran su fuerza incontrolable.

-Como el buen Pastor, Dios sale a las calles para encontramos cuando huimos de las Iglesias, pues decimos que Dios está en crisis, cuando somos nosotros que, creyendo, pensamos vivir como ateos.

“Mis ovejas escuchan mis voz…”
-Como el buen Pastor, que bueno sería escuchar su voz, callarnos, silenciarnos; simplemente escucharlo. Pues sólo su voz, cambiará nuestra vida.

Ahora cuando todo el panorama religioso ha cambiado, solo la experiencia de Dios de cada ser humano, cambiará nuestra vida.
Amílcar Ferro B mxy

Sunday 11 April 2010

II DOMINGO DE PASCUA


DOMINGO DE LA MISERICORDIA
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN
20, 19-31

Al anochecer de aquel día, el día primero de la semana, estaban los discípulos en una casa con las puertas cerradas, por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo:
-- Paz a vosotros.
Y diciendo esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió:
-- Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os
envío yo.
Y dicho esto, exhaló su aliento sobre ellos y les dijo:
-- Recibid el Espíritu Santo; a quienes les perdonéis los pecados les quedan perdonados; a quienes se los retengáis les quedan retenidos.
Tomás, uno de los doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino el Señor. Y los otros discípulos le decían:
-- Hemos visto al Señor.

Pero él les contestó:
-- Si no veo en sus manos la señal de los clavos y no meto el dedo en el agujero de los clavos, si no meto la mano en su costado, no lo creo.
A los ocho días estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y les dijo:
-- Paz a vosotros.

-- Luego dijo a Tomás:

-- Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.
Contestó Tomas:
-- ¡Señor mío y Dios mío!
Jesús le dijo:
-- ¿Porque me has visto has creído? Dichosos los que crean si
haber visto.

Muchos otros signos, que no están escritos en este libro, hizo Jesús a la vista de los discípulos. Estos se han escrito para que creáis que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que, creyendo, tengáis vida en su Nombre.

Sunday 4 April 2010

RESUCITÓ, ALELUYA,PASCUA, ALELUYA


LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN
20, 1-9

El primer día de la semana, María Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro. Echó a correr y fue a donde estaba Simón Pedro y el otro discípulo, a quien quería Jesús, y le dijo:

—Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto.
Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; y, asomándose, vio las vendas en el suelo; pero no entró.
Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro; vio las vendas en el suelo y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no por el suelo con las vendas, sino enrollado en un sitio aparte.
Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó. Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura:
que Él había de resucitar de entre los muertos.

Sunday 28 March 2010

DOMINGO DE RAMOS




LECTURA DE LA PASION SEGUN SAN LUCAS

Lucas 22, 14-23, 56


He deseado enormemente comer esta comida pascual con vosotros, antes de padecer
C. Llegada la hora, se sentó Jesús con sus discípulos y les dijo:
+ - «He deseado enormemente comer esta comida pascual con vosotros, antes de padecer, porque os digo que ya no la volveré a comer, hasta que se cumpla en el reino de Dios.»
C. Y, tomando una copa, pronunció la acción de gracias y dijo:
+ - «Tomad esto, repartidlo entre vosotros; porque os digo que no beberé desde ahora del fruto de la vid, hasta que venga el reino de Dios.»
Haced esto en memoria mía
C. Y, tomando pan, pronunció la acción de gracias, lo partió y se lo dio, diciendo:
+ - «Esto es mi cuerpo, que se entrega por vosotros; haced esto en memoria mía.»
C. Después de cenar, hizo lo mismo con la copa, diciendo:
+ - «Esta copa es la nueva alianza, sellada con mi sangre, que se derrama por vosotros.»
¡Ay de ése que entrega al Hijo del hombre!
«Pero mirad: la mano del que me entrega está con la mía en la mesa. Porque el Hijo del hombre se va, según lo establecido; pero, ¡ay de ése que lo entrega!»
C. Ellos empezaron a preguntarse unos a otros quién de ellos podía ser el que iba a hacer eso.
Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve
C. Los discípulos se pusieron a disputar sobre quién de ellos debía ser tenido como el primero. Jesús les dijo:
+ - «Los reyes de las naciones las dominan, y los que ejercen la autoridad se hacen llamar bienhechores. Vosotros no hagáis así, sino que el primero entre vosotros pórtese como el menor, y el que gobierne, como el que sirve.
Porque, ¿quién es más, el que está en la mesa o el que sirve? ¿Verdad que el que está en la mesa? Pues yo estoy en medio de vosotros como el que sirve.
Vosotros sois los que habéis perseverado conmigo en mis pruebas, y yo os transmito el reino como me lo transmitió mi Padre a mí: comeréis y beberéis a mi mesa en mi reino, y os sentaréis en tronos para regir a las doce tribus de Israel.»
Tú, cuando te recobres, da firmeza a tus hermanos
C. Y añadió:
+ - «Simón, Simón, mira que Satanás os ha reclamado para cribaros como trigo. Pero yo he pedido por ti, para que tu fe no se apague. Y tú, cuando te recobres, da firmeza a tus hermanos.»
C. Él le contesto:
S. -«Señor, contigo estoy dispuesto a ir incluso a la cárcel y a la muerte.»
C. Jesús le replicó:
+ - «Te digo, Pedro, que no cantará hoy el gallo antes que tres veces hayas negado conocerme.»
Tiene que cumplirse en mí lo que está escrito
C. Y dijo a todos:
+ - «Cuando os envié sin bolsa, ni alforja, ni sandalias, ¿os faltó algo?»
C. Contestaron:
S. - «Nada.»
C. Él añadió:
+ - «Pero ahora, el que tenga bolsa que la coja, y lo mismo la alforja; y el que no tiene espada, que venda su manto y compre una. Porque os aseguro que tiene que cumplirse en mí lo que está escrito: Fue contado con los malhechores." Lo que se refiere a mí toca a su fin.»
C. Ellos dijeron:
S. - «Señor, aquí hay dos espadas.»
C. Él les contesto:
+ - «Basta.»
En medio de su angustia, oraba con más insistencia
C. Y salió Jesús, como de costumbre, al monte de los Olivos, y lo siguieron los discípulos. Al llegar al sitio, les dijo:
+ - «Orad, para no caer en la tentación.»
C . Él se arrancó de ellos, alejándose como a un tiro de piedra y, arrodillado, oraba, diciendo:
+ - «Padre, si quieres, aparta de mí ese cáliz; pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya.»
C - Y se le apareció un ángel del cielo, que lo animaba. En medio de su angustia, oraba con más insistencia. Y le bajaba hasta el suelo un sudor como de gotas de sangre. Y, levantándose de la oración, fue hacia sus discípulos, los encontró dormidos por la pena, y les dijo:
+ - «¿Por qué dormís? Levantaos y orad, para no caer en la tentación.»
Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del hombre?
C. Todavía estaba hablando, cuando aparece gente; y los guiaba el llamado Judas, uno de los Doce. Y se acercó a besar a Jesús.
Jesús le dijo:
+ - «Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del hombre?»
C. Al darse cuenta los que estaban con él de lo que iba a pasar, dijeron:
S. - «Señor, ¿herimos con la espada?»
C. Y uno de ellos hirió al criado del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha.
Jesús intervino, diciendo:
+ - «Dejadlo, basta.»
C. Y, tocándole la oreja, lo curó. Jesús dijo a los sumos sacerdotes y a los oficiales del templo, y a los ancianos que habían venido contra él:
+ - «¿Habéis salido con espadas y palos, como a caza de un bandido? A diario estaba en el templo con vosotros, y no me echasteis mano. Pero ésta es vuestra hora: la del poder de las tinieblas.»
Pedro, saliendo afuera, lloró amargamente
C. Ellos lo prendieron, se lo llevaron y lo hicieron entrar en casa del sumo sacerdote. Pedro lo seguía desde lejos. Ellos encendieron fuego en medio del patio, se sentaron alrededor, y Pedro se sentó entre ellos.
Al verlo una criada sentado junto a la lumbre, se lo quedó mirando y dijo:
S. - «También éste estaba con él.»
C. Pero él lo negó, diciendo:
S. - «No lo conozco, mujer.»
C. Poco después lo vio otro y le dijo:
S. - «Tú también eres uno de ellos.»
C. Pedro replicó:
S. - «Hombre, no lo soy.»
C. Pasada cosa de una hora, otro insistía:
S. - «Sin duda, también éste estaba con él, porque es galileo.»
C. Pedro contestó:
S. - «Hombre, no sé de qué me hablas.»
C. Y, estaba todavía hablando, cuando cantó un gallo. El Señor, volviéndose, le echó una mirada a Pedro, y Pedro se acordó de la palabra que el Señor le había dicho: «Antes de que cante hoy el gallo, me negarás tres veces.» Y, saliendo afuera, lloró amargamente.
Haz de profeta; ¿quién te ha pegado?
C. Y los hombres que sujetaban a Jesús se burlaban de él, dándole golpes.
Y, tapándole la cara, le preguntaban:
S. - «Haz de profeta; ¿quién te ha pegado?»
C. Y proferían contra él otros muchos insultos.
Lo hicieron comparecer ante su Sanedrín
C. Cuando se hizo de día, se reunió el senado del pueblo, o sea, sumos sacerdotes y escribas, y, haciéndole comparecer ante su Sanedrín, le dijeron:
S. - «Si tú eres el Mesías, dínoslo.»
C. Él les contesto:
+ - «Si os lo digo, no lo vais a creer; y si os pregunto, no me vais a responder.
Desde ahora, el Hijo del hombre estará sentado a la derecha de Dios todopoderoso.»
C. Dijeron todos:
S. - «Entonces, ¿tú eres el Hijo de Dios?»
C. Él les contestó:
+ - «Vosotros lo decís, yo lo soy.»
C. Ellos dijeron:
S. - «¿Qué necesidad tenemos ya de testimonios? Nosotros mismos lo hemos oído de su boca.»
C. Se levantó toda la asamblea, y llevaron a Jesús a presencia de Pilato.
No encuentro ninguna culpa en este hombre
C. Y se pusieron a acusarlo, diciendo:
S. - «Hemos comprobado que éste anda amotinando a nuestra nación, y oponiéndose a que se paguen tributos al César, y diciendo que él es el Mesías rey.»
C. Pilato preguntó a Jesús:
S. - «¿Eres tú el rey de los judíos?»
C. Él le contestó:
+, - «Tú lo dices.»
C. Pilato dijo a los sumos sacerdotes y a la gente:
S. - «No encuentro ninguna culpa en este hombre.»
C. Ellos insistían con más fuerza, diciendo:
S. - «Solivianta al pueblo enseñando por toda Judea, desde Galilea hasta aquí.»
C. Pilato, al oírlo, preguntó si era galileo; y, al enterarse que era de la jurisdicción de Herodes, se lo remitió. Herodes estaba precisamente en Jerusalén por aquellos días.
Herodes, con su escolta, lo trató con desprecio
C. Herodes, al ver a Jesús, se puso muy contento; pues hacía bastante tiempo que quería verlo, porque oía hablar de él y esperaba verle hacer algún milagro. Le hizo un interrogatorio bastante largo; pero él no le contestó ni palabra.
Estaban allí los sumos sacerdotes y los escribas acusándolo con ahínco. Herodes, con su escolta, lo trató con desprecio y se burló de él; y, poniéndole una vestidura blanca, se lo remitió a Pilato. Aquel mismo día se hicieron amigos Herodes y Pilato, porque antes se llevaban muy mal.
Pilato entregó a Jesús a su arbitrio
C. Pilato, convocando a los sumos sacerdotes, a las autoridades y al pueblo, les dijo:
S. - «Me habéis traído a este hombre, alegando que alborota al pueblo; y resulta que yo lo he interrogado delante de vosotros, y no he encontrado en este hombre ninguna de las culpas que le imputáis; ni Herodes tampoco, porque nos lo ha remitido: ya veis que nada digno de muerte se le ha probado. Así que le daré un escarmiento y lo soltaré.»
C. Por la fiesta tenía que soltarles a uno. Ellos vociferaron en masa, diciendo:
S. - «¡Fuera ése! Suéltanos a Barrabás.»
C. A éste lo habían metido en la cárcel por una revuelta acaecida en la ciudad y un homicidio.
Pilato volvió a dirigirles la palabra con intención de soltar a Jesús. Pero ellos seguían gritando:
S. - «¡Crucifícalo, crucifícalo!»
C. Él les dijo por tercera vez:
S. - «Pues, ¿qué mal ha hecho éste? No he encontrado en él ningún delito que merezca la muerte. Así es que le daré un escarmiento y lo soltaré.»
C. Ellos se le echaban encima, pidiendo a gritos que lo crucificara; e iba creciendo el griterío.
Pilato decidió que se cumpliera su petición: soltó al que le pedían (al que había metido en la cárcel por revuelta y homicidio), y a Jesús se lo entregó a su arbitrio.
Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí
C. Mientras lo conducían, echaron mano de un cierto Simón de Cirene, que volvía del campo, y le cargaron la cruz, para que la llevase detrás de Jesús.
Lo seguía un gran gentío del pueblo, y de mujeres que se daban golpes y lanzaban lamentos por él.
Jesús se volvió hacia ellas y les dijo:
+ - «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí, llorad por vosotras y por vuestros hijos, porque mirad que llegará el día en que dirán: "Dichosas las estériles y los vientres que no han dado a luz y los pechos que no han criado." Entonces empezarán a decirles a los montes: "Desplomaos sobre nosotros", y a las colinas: "Sepultadnos"; porque, si así tratan al leño verde, ¿qué pasara con el seco?»
C. Conducían también a otros dos malhechores para ajusticiarlos con él.
Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen
C. Y, cuando llegaron al lugar llamado «La Calavera», lo crucificaron allí, a él y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda.
Jesús decía:
+ - «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.»
C. Y se repartieron sus ropas, echándolas a suerte.
Éste es el rey de los judíos
C. El pueblo estaba mirando.
Las autoridades le hacían muecas, diciendo:
S - «A otros ha salvado; que se salve a sí mismo, si él es el Mesías de Dios, el Elegido.»
C. Se burlaban de él también los soldados, ofreciéndole vinagre y diciendo:
S. - «Si eres tú el rey de los judíos, sálvate a ti mismo.»
C. Había encima un letrero en escritura griega, latina y hebrea: «Éste es el rey de los judíos.»
Hoy estarás conmigo en el paraíso
C. Uno de los malhechores crucificados lo insultaba, diciendo:
S. - «¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros.»
C. Pero el otro le increpaba:
S. - «¿Ni siquiera temes tú a Dios, estando en el mismo suplicio? Y lo nuestro es justo, porque recibimos el pago de lo que hicimos; en cambio, éste no ha faltado en nada.»
C Y decía:
S. - «Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino.»
C. Jesús le respondió:
+ - «Te lo aseguro: hoy estarás conmigo en el paraíso.»
Padre,a tus manos encomiendo mi espíritu
C. Era ya eso de mediodía, y vinieron las tinieblas sobre toda la región, hasta la media tarde; porque se oscureció el sol. El velo del templo se rasgó por medio. Y Jesús, clamando con voz potente, dijo:
+ - «Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu.»
C. Y, dicho esto, expiró.
Todos se arrodillan, y se hace una pausa
C. El centurión, al ver lo que pasaba, daba gloria a Dios, diciendo:
S. - «Realmente, este hombre era justo.»
C. Toda la muchedumbre que había acudido a este espectáculo, habiendo visto lo que ocurría, se volvía dándose golpes de pecho.
Todos sus conocidos se mantenían a distancia, y lo mismo las mujeres que lo habían seguido desde Galilea y que estaban mirando.
José colocó el cuerpo de Jesús en un sepulcro excavado
C. Un hombre llamado José, que era senador, hombre bueno y honrado (que no había votado a favor de la decisión y del crimen de ellos), que era natural de Arimatea, pueblo de Judea, y que aguardaba el reino de Dios, acudió a Pilato a pedirle el cuerpo de Jesús. Y, bajándolo, lo envolvió en una sábana y lo colocó en un sepulcro excavado en la roca,
donde no habían puesto a nadie todavía.


Era el día de la Preparación y rayaba el sábado. Las mujeres que lo habían acompañado desde Galilea fueron detrás a examinar el sepulcro y cómo colocaban su cuerpo.

A la vuelta, prepararon aromas y ungüentos. Y el sábado guardaron reposo, conforme al mandamiento.

Saturday 20 March 2010

V DOMINGO DE CUARESMA



"Tampoco yo te condeno. Anda y en adelante no peques más"


LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN

8, 1- 11

En aquel tiempo, Jesús se retiró al Monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo y todo el pueblo acudía a él, y, sentándose, les enseñaba.
Los letrados y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio y colocándola en medio, le dijeron:


-- Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adulteras: tú, ¿qué dices?
Le preguntaban esto para comprometerlo, y poder acusarlo. Pero Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en el suelo. Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo:
-- El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra.


E inclinándose otra vez, siguió escribiendo. Ellos, al oírlo, se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos, hasta el último. Y se quedó solo Jesús y la mujer en medio de pie.
Jesús se incorporó y le preguntó:
-- Mujer, ¿dónde están tus acusadores? ¿Ninguno te ha condenado?
Ella le contestó
-- Ninguno, Señor.
Jesús dijo:
-- Tampoco yo te condeno. Anda y en adelante no peques más.


Nota.
“yo tampoco te condeno. Anda y en adelante no peques más”
El evangelio no nos dice quién era el hombre que había pecado con la mujer, como tampoco nos dice si estaba casada o no.
Por otra parte, en este último domingo de cuaresma podemos contemplar una vez más; la misericordia y el amor de Jesús frente al pecador. No es indiferente a nuestro pecado, pero quiere enseñarnos a ver más lejos, a fijarnos nuevos horizontes; a empezar una vida nueva: “yo tampoco te condeno. Anda y en adelante no peques más”

Durante muchos años hemos pensado que la influencia de la religión nos ha enseñado ha desvalorar la mujer; sin embargo, las presiones culturales de todas las épocas, son también responsables del lugar que se le ha negado a la mujer en la sociedad.

La actitud de Jesús es reveladora del lugar que ella debe ocupar en el mundo.
El evangelio también nos da la oportunidad de meditar sobre la concepción muy aceptada entre nosotros, de que el sexo es el pecado más grande, como si fuera el único pecado. Es verdad que no debemos ser irresponsables con nuestra afectividad y que hay excesos, tenemos que admitirlo; pero también existen otras actitudes que nos alejan de Dios y sin embargo no les prestamos mucha atención.

La falta de solidaridad, el egoísmo, la acumulación de riquezas sin sentido, la falta de participación activa en la comunidad cristiana, de compromiso con la justicia; estas actitudes no nos parecen delicadas en la relación con Dios. No obstante, ellas, estas actitudes; nos apartan del amor de Dios y de los hermanos, nos impiden desarrollar la vocación a la cual Dios nos ha llamado.

Que bueno, esta semana pensar en las actitudes que tenemos frente a la mujer, pues hemos avanzado en la reflexión sobre sus derechos, pero a la hora de actuar, somos contradictorios.

Amílcar Ferro B. mxy

Saturday 13 March 2010

IV DOMINGO DE CUARESMA

LA PARABOLA DE LOS DOS HIJOS
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS
15- 1-3.11-32

En aquel tiempo, solían acercarse a Jesús los publicanos y los pecadores a escucharle. Y los fariseos y los escribas murmuraban entre ellos.
-- Ese acoge a los pecadores y come con ellos.
Jesús les dijo esta parábola:

-- Un hombre tenía dos hijos: el menor de ellos dijo a su padre:
"Padre, dame la parte que me toca de la fortuna" El padre les repartió los bienes. No muchos días después, el hijo menor, juntando lo suyo, emigró a un país lejano, y allí derrochó su fortuna viviendo perdidamente. Cuando lo había gastado todo, vino por aquella tierra un hambre terrible y empezó él a pasar necesidad. Fue entonces y tanto le insistió a un habitante de aquel país, que lo mandó a sus campos a guardar cerdos. Le entraban ganas de llenarse el estómago de las algarrobas que comían los cerdos; y nadie le daba de comer. Recapacitando entonces se dijo:

"Cuantos jornaleros de mi padre tienen abundancia de pan, mientras yo aquí me muero de hambre. Me pondré en camino adonde está mi padre, y le diré: "Padre he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo: trátame como a uno de tus jornaleros."
Se puso en camino adonde estaba su padre: cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se conmovió y echando a correr, se le echó al cuello y se puso a besarlo. Su hijo le dijo:
"Padre, he pecado contra el cielo y contra ti; ya no merezco llamarme hijo tuyo”:
Pero el padre dijo a sus criados:

"Sacad enseguida el mejor traje y vestidlo, ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies; traed el ternero cebado y matadlo; celebremos un banquete; porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido; estaba perdido y lo hemos encontrado."
Y empezaron el banquete. Su hijo mayor estaba en el campo. Cuando al volver se acercaba a la casa, oyó la música y el baile, y llamando a uno de los mozos, le preguntó que pasaba. Este le contestó:

"Ha vuelto tu hermano; y tu padre ha matado el ternero cebado, porque lo ha recobrado con salud."
El se indignó y se negaba a entrar, pero su padre salió e intentaba persuadirlo. Y él replicó a su padre:
"Mira: en tantos años como te sirvo, sin desobedecer nunca una orden tuya, a mí nunca me has dado un cabrito para tener un banquete con mis amigos; y cuando ha venido ese hijo tuyo que se ha comido tus bienes con malas mujeres le matas el ternero cebado."
El padre le dijo:

"Hijo, tu estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo deberías alegrarte, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha revivido, estaba perdido, y lo hemos encontrado."

El Dios de la misericordia…Nuestro Dios.
Nota.

El evangelio de este domingo nos propone el tema preferido de Lucas en su evangelio, “la misericordia”
En el evangelio de “los dos hermanos”; como prefiero llamarlo, san Lucas nos quiere invitar a descubrir el verdadero rostro de Dios; a veces desfigurado por nuestras ideas personales, adquiridas en la formación, o simplemente poco meditadas. La verdad es que poco tiempo dedicamos a las “cosas de Dios” como suelen decir algunos.

Publicanos, fariseos y pecadores venían a escuchar a Jesús, nos dice el evangelio; pero “del dicho al hecho” hay mucho trecho, nos repiten los mayores. Una cosa es justa, escuchar es la primera actitud del discípulo. Dejemos entonces hablar a Dios, escuchémoslo y luego actuemos.
Un hijo regresa y el Padre lo recibe con una fiesta, su hermano mayor no acepta la actitud del padre, pues su hermano menor, que no reconoce pues lo llama; “ese hijo tuyo” no participa de la fiesta. Se toma más bien todo el tiempo para recordarle al Padre lo malo que ha hecho “su hijo”. Actitud de todos los que se consideran fieles y no se abren a los otros, cuando el primer signo de amor es ir al encuentro de los hermanos.

El Dios de la ley era el Dios lo fariseos y publicanos, imagen que a veces conservamos. El Dios de Jesucristo es el Dios que “come con todos”, acepta a todos, espera nuestro regreso.
Un Dios que sobrepasa la medida de nuestro amor, un Dios que ama con misericordia. Que rompe incluso con normas establecidas: “cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se conmovió y echando a correr, se le echó al cuello y se puso a besarlo.”
Que no nos pase como al hijo mayor, que se creía justo y cumplidor de la ley y se perdió el banquete.
Amílcar Ferro B. mxy

Saturday 6 March 2010

III DOMINGO DE CUARESMA

Lucas
13, 1-9
Si no os convertís, todos pereceréis de la misma manera
Eu una ocasión, se presentaron algunos a contar a Jesús lo de los galileos cuya sangre vertió Pilato con la de los sacrificios que ofrecían. Jesús contestó:
-"¿Pensáis que esos galileos eran más pecadores que los demás galileos, porque acabaron así? Os digo que no; y, si no os convertís,
todos pereceréis lo mismo. Y aquellos dieciocho que murieron aplastados por la torre de Siloé, ¿pensáis que eran más culpables que los demás habitantes de Jerusalén? Os digo que no; y, si no os convertís, todos pereceréis de la misma manera."
Y les dijo esta parábola: "Uno tenía una higuera plantada en su viña, y fue a buscar fruto en ella, y no lo encontró.
Dijo entonces al viñador: "Ya ves: tres años llevo viniendo a buscar fruto en esta higuera, y no lo encuentro. Córtala. ¿Para qué va a ocupar terreno en balde?
Pero el viñador contestó: "Señor, déjala todavía este año; yo cavaré alrededor y le echaré estiércol, a ver si da fruto. Si no, la cortas"."
Nota.
En este tercer domingo de cuaresma, la iglesia, a través de la liturgia, nos invita a continuar nuestra caminada hacia la pascua; pero esta vez, debemos aprender a escuchar, descubrir a Dios en la historia, aceptar que El nos habla en los acontecimientos cotidianos.
Un Dios que no nos deja solos, sino que escucha, ve y atiende nuestros gritos de dolor y de sufrimiento. Un Dios cercano a cada situación humana.

Esta actitud de escucha, requiere de nosotros, en este tiempo de cuaresma, una conversión al amor y a la misericordia de Dios. Pensar que Dios nos da o “paga” según nuestros méritos, es volver a la ley de la “retribución”, una mentalidad ya superada. Una imagen de Dios caduca.
El Dios de Jesucristo, nuestro Dios; es un Dios que espera la conversión del hombre. Dios de la esperanza: Señor, déjala todavía este año; yo cavaré alrededor y le echaré estiércol, a ver si da fruto. Si no, la cortas".

Existen aún cristianos que creen en Dios, o mejor desearían que Dios actuara según los criterios humanos, en un Dios que dé a cada uno según nuestros parámetros; olvidándose así de lo que nos dice el salmo 102 de este domingo: “El Señor es compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en clemencia; como se levanta el cielo sobre la tierra, se levanta su bondad sobre sus fieles”.

Saturday 20 February 2010

I DOMINGO DE CUARESMA



"TU ME TENTAS"

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS


4, 1-13

En aquel tiempo, Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán y, durante cuarenta días, el Espíritu lo fue llevando por el desierto, mientras era tentado por el diablo. Todo aquel tiempo estuvo sin comer, y al final sintió hambre.
Entonces el diablo le dijo:
-- Si eres Hijo de Dios, dile a esta piedra que se convierta en pan.
Jesús le contestó:
-- Está escrito: “No solo de pan vive el hombre”.
Después, llevándole a lo alto, el diablo le mostró en un instante todos los reinos del mundo y le dijo:
-- Te daré el poder y la gloria de todo eso, porque a mi me lo han dado, y yo lo doy a quien quiero. Si tú te arrodillas delante de mí, todo será tuyo.
Jesús le contestó:
-- Está escrito: “Al señor, tu Dios, adorarás y al solo darás culto”
Entonces lo llevó a Jerusalén y lo puso en el alero del templo y le dijo:
-- Si eres Hijo de Dios, tírate de aquí abajo, porque está escrito: “Encargará a los ángeles que cuiden de ti", y también: "Te sostendrán en sus manos, para que tu pie no tropiece con las piedras."
Jesús le contestó:
-- Está mandado: “No tentarás al Señor, tu Dios”.
Completadas las tentaciones, el demonio se marchó hasta otra ocasión.
Nota.
“En aquel tiempo, Jesús, lleno del Espíritu Santo,(…)”


El tiempo de cuaresma es un tiempo para “volver a Dios”, escuchamos con frecuencia.
La cuaresma es un tiempo para volver a Dios, volviendo a nosotros mismos; es decir, tomando el tiempo para reflexionar sobre nuestras convicciones las más profundas.

Es un tiempo para fortalecer todos los valores que nos acercan a Dios y a los hermanos.
Tiempo para fortalecer los lazos familiares, todo aquello que nos hace más humanos.
Tiempo para pensar a qué le doy prioridad, en mi vida cotidiana; en fin, qué es lo que me hace escoger éste o aquél modo de vida.

Cuaresma es el tiempo para pensar en mi equilibrio con el universo: Cómo estoy utilizando este don de Dios tan precioso como es la naturaleza.
En fin, cuaresma es también un tiempo privilegiado para aceptar las cosas, actitudes, costumbres que no me hacen fundamentalmente feliz y frente a las cuales tengo que decir stop! Cambio de dirección, acepto el error, busco el camino que me hace más libre y feliz.
La cuaresma es un tiempo para crecer en humanidad! Tiempo para seguir a Jesucristo, nuestro Señor.

Saturday 13 February 2010

VI DOMINGO ORDINARIO


AÑO -C-
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS 6, 17, 20-26
En aquel tiempo, bajo Jesús del monte con los Doce y se paró en un llano con un grupo grande de discípulos y de pueblo, procedentes de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón. Él, levantando los ojos hacía sus discípulos, les dijo:

--Dichosos los pobres, porque vuestro es el Reino de Dios.
Dichosos los que ahora tenéis hambre, porque quedaréis saciados.
Dichosos los que ahora lloráis, porque reiréis.
Dichosos vosotros cuando os odien los hombres, y os excluyan, y os insulten y proscriban vuestro nombre como infame, por causa del Hijo del Hombre.
Alegraos ese día y saltad de gozo; porque vuestra recompensa será grande en el cielo. Eso es lo que hacían vuestros padres con los profetas.
Pero, ¡ay de vosotros, los ricos, porque ya tenéis vuestro consuelo!
¡Ay de vosotros, los que estáis saciados, porque tendréis hambre!
¡Ay de los que ahora reís, porque haréis duelo y lloraréis! ¡Ay si todo el mundo habla bien de vosotros! Eso es lo que hacían vuestros padres con los falsos profetas.

Nota.

En los salmos y en la literatura sapiencial en general, se considera bienaventurada a una persona que cumple fielmente la ley.
Con las bienaventuranzas, Jesús nos invita a dar un paso más en nuestro compromiso como discípulos suyos, que buscamos ser.
Los pobres de los que nos habla San Lucas son los verdaderos pobres, los que no tienen nada, los olvidados de la sociedad de todas las épocas, aquellos que los gobiernos y políticos buscan esconder en las grandes fiestas o visitas de los Papas, paradójicamente. Pues en algún rincón de la conciencia saben éstos, que no hacen lo necesario y que sus leyes excluyen a personas y las marginan.

Jesús pone su atención en la persona, en el que sufre y no en el cumplimiento de la ley, es lo que podemos deducir de la atención especial en las diferencias sociales que Lucas suele poner en los diferentes pasajes de su evangelio. Preocupación por la pobreza; pero seguramente expresión de una realidad de la comunidad de su época, en la que él vive.

Los pobres son los que Dios ha escogido con especial atención, pues son los que sufren las desigualdades e injusticias de los hombres; también porque ellos ponen su confianza en el “Señor que todo lo puede”. Su corazón es dócil al llamado de Dios. Con esto no queremos decir; que debemos generar pobreza o mantenerla; pues ésta atenta contra la dignidad del ser humano, además, de ser una vergüenza para la humanidad y todos los sistemas sociales.
Preguntémonos esta semana, si los pobres tienen lugar en el presupuesto mensual de mi familia!

Saturday 6 February 2010

V DOMINGO T. ORDINARIO -C-


LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS

5, 1-11
En aquel tiempo, la gente se agolpaba alrededor de Jesús para oír la Palabra de Dios, estando él a orillas del lago de Genesaret; y vio dos barcas que estaban junto a la orilla: los pescadores habían desembarcado y estaban lavando las redes. Subió a una de las barcas, la de Simón, y le pidió que le apartara un poco de tierra. Desde la barca, sentado, enseñaba a la gente. Cuando acabó de hablar, dijo a Simón:
-- Rema mar adentro y echad las redes para pescar.
Simón contestó:
-- Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes.
Y, puestos a la obra, hicieron una redada de peces grande, que reventaba la red. Hicieron señas a los socios de la otra barca, para que vinieran a echarles una mano. Se acercaron ellos y llenaron las dos barcas, que casi se hundían. Al ver esto, Simón Pedro se arrojó a los pies de Jesús diciendo:

-- Apártate de mí, Señor, que soy un pecador.
Y es que el asombro se había apoderado de él y de los que estaban con él, al ver la redada de peces que habían cogido; y lo mismo pasaba a Santiago y Juan, hijos del Zebedeo, que eran compañeros de Simón:
-- No temas: desde ahora, serás pescador de hombres
Ellos sacaron las barcas a tierra y, dejándolo todo, lo
siguieron.

Nota
“...Simón contestó:
-- Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes. (…)
-- Apártate de mí, Señor, que soy un pecador.
-- No temas: desde ahora, serás pescador de hombres…”

El temor que paraliza.
Estas frases tomadas del evangelio, nos dan la clave del mensaje de hoy.
El ser humano que se deja tocar por Dios, experimenta el sentimiento de culpa, necesario para pasar a la etapa siguiente: la petición de perdón y la recepción del amor y la misericordia de Dios.
“Apártate de mí, Señor, que soy un pecador”. El sentimiento de culpa “no es una invención de las religiones”, sino que constituye una de las experiencias humanas más antiguas y universales” nos dice un autor.

Con frecuencia orientamos mal este sentimiento y es allí donde surge la dificultad; pues en este sentimiento puede Dios sanarnos y hacernos experimentar su amor siempre presente, contrariamente a arrastrar toda la vida un sentimiento de culpabilidad. Al hombre moderno le cuesta recocer los pecados cometidos, es más; dice que nada es pecado. Es verdad que la visión de pecado puede cambiar; pero el pecado es una realidad humana que debemos aceptar. Nada más humano que sentir que nos hemos equivocado. Que bueno, también, poder sentir que tenemos que cambiar de vida, corregir los errores y poder aceptar el amor de Dios que restaura nuestras relaciones y nos integra a la comunidad, que nos expresa su perdón y amor infinito.

-- No temas: desde ahora, serás pescador de hombres…”

El temor al igual que el sentimiento de culpa mal vivido, pueden bloquear la apertura al amor de Dios. Pueden incluso bloquear nuestra proyección cristiana, hacer que guardemos todos los dones y talentos recibidos; no explotarlos, ser como dicen algunos; “alguien del montón”, mientras nuestra creatividad duerme profundamente.

Confianza en Dios.
En estas ocasiones se hace necesario repetir las palabras de Simón: Maestro, nos hemos pasado la noche bregando y no hemos cogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes. (…)
Esta es la invitación para este domingo, tirar las redes con la confianza puesta en el Señor, que sabe multiplicar todos nuestros esfuerzos en la construcción de un mundo mejor.
Solo la fe en Jesús nos permite ver el milagro; “porque el milagro surge cuando somos capaces de creer en lo que parece ilógico”.
Dejémonos impresionar y luego cambiar por la Palabra del Señor.
Amílcar Ferro B. mxy





Saturday 30 January 2010

IV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

AÑO LITÚRGICO -C-
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS
4, 21-30

En aquel tiempo, comenzó Jesús a decir en la sinagoga:
-- Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír:
Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios. Y se decían:
-- ¿No es este el hijo de José?
Y Jesús les dijo:
-- Sin duda me recitareis aquel refrán: “Médico, cúrate ti mismo”: haz también aquí en tu tierra lo que has hecho en Cafarnaún.
Y añadió:
-- Os aseguro que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Os garantizo que en Israel había muchas viudas en tiempo de Elías, cuando estuvo cerrado el cielo tres años y seis meses y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías más que a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del Profeta Elíseo, sin embargo, ninguno de ellos fue curado más que Naamán, el sirio.

Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo. Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba.


Nota

El cristiano de hoy, está enfrentado a vivir su fe en un mundo que cada día será menos favorable a los valores del evangelio, y a otro cristianismo en gestación.
Este desafío, lejos de invitar al cristiano seguir la corriente del común de la gente; debe conducirlo a no renunciar a sus propios valores, a sentirse orgulloso del llamado del Señor y a no tener miedo a ser diferente, en una cultura que nos uniformiza.

El amor a la Palabra y su compromiso de bautizado, (en el bautismo el sacerdote dice en el momento de la unción con el santo Crisma:"...Y seas para siempre miembro de Cristo, sacerdote, profeta y Rey) ; serán las fuerzas que lo empujaran a ser profeta con su testimonio de vida, también con su palabra, en cualquier situación humana que viva.
Su compromiso con la Palabra, no lo librara de las vicisitudes de la vida y de la sociedad, sino que le dará la seguridad de la presencia de Dios en la historia, a través del amor al mensaje de Jesús y de su testimonio de vida.

Amílcar Ferro B. mxy

Saturday 23 January 2010

III DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO C

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS
1, 1-4; 14-21

Ilustre Teófilo
IMuchos han emprendido la tarea de componer un relato de los hechos que se han verificado entre nosotros, siguiendo las tradiciones transmitidas por los que primero fueron testigos oculares y luego predicadores de la Palabra. Yo también, después de comprobarlo todo exactamente desde el principio, he resuelto escribírtelos por su orden, para que conozcas la solidez de las enseñanzas que has recibido.

En aquel tiempo, Jesús volvió a Galilea, con la fuerza del Espíritu; y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas y todos lo alababan. Fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el Libro del Profeta Isaías y desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito:

--“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista. Para dar libertad a los oprimidos; para anunciar el año de gracia del Señor".

Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba, y se sentó.
Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles:
-- Hoy se cumple esta escritura que acabáis de oír.


Nota.

La liturgia de este domingo, nos muestra el programa de vida de Jesús y por ende de todo aquél que ha recibido “la Unción del espíritu” es decir todos los cristianos confirmados en la fe.
Anunciar la “Buena Nueva” a los pobres debe constituir una preocupación constante en la vida de las comunidades cristianas y de toda la Iglesia.

El mensaje de Jesús debe “Liberar” a los más necesitados, a los que sufren. Los ojos del cristiano tienen que buscar el dolor de los hombres y mujeres de nuestro tiempo, siempre atentos a expresar con la ayuda incondicional, el rostro del Señor, para decirle que nos ama a todos.
Que las diferencias que crecen en mundo, en cuanto a las posibilidades o no, que tienen los seres humanos al acceso a la alimentación, a la salud, al trabajo y diferentes necesidades para lograr la felicidad, son fruto del egoísmo del hombre y no voluntad de Dios.
El caso de Haití es el más palpable en estos días.

Todo el mundo se ha movilizado, qué bueno!
¿Pero siempre debemos esperar una catástrofe para expresar nuestra solidaridad? Qué bueno poner nuestra mirada más lejos, o mejor hacer una análisis más profundo para buscar soluciones a una realidad que dura desde siempre. Varios colonizadores han pasado, los han dejado más pobres!

No contentarnos con una frase que se escucha a menudo en Europa con respecto a los países en vía de desarrollo:

“El gran problema son los gobiernos corruptos que no permiten a los pueblos salir de la miseria”. Tienen razón y es una verdad cruel! Pero cuando conocemos las historias de ciertos pueblos, son justamente las grandes potencias que han corrompido los gobiernos para poder comprar los minerales u otros a buen precio o en condiciones desequilibradas.
Todos entonces estamos hoy invitados a proclamar esa “Palabra que libera”, con nuestro testimonio de vida.

Amílcar Ferro B. mxy


Saturday 16 January 2010

II DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN
2, 1-11

En aquel tiempo, había una boda en Caná de Galilea y la madre de Jesús estaba allí; Jesús y sus discípulos estaban también invitados a la boda. Faltó el vino y la madre de Jesús le dijo:
-- No les queda vino. Jesús le contentó:
-- Mujer, déjame, todavía no ha llegado mi hora.
Su madre dijo a los sirvientes:
-- Haced lo que él os diga.

Había allí colocadas seis tinajas de piedra, para las purificaciones de los judíos, de unos cien litros cada una. Jesús les dijo: Llenad las tinajas de agua.
Y las llenaron hasta arriba. Entonces les mandó:
Sacad ahora, y llevádselo al mayordomo.

El mayordomo probó el agua convertido en vino sin saber de donde venía (los sirvientes si lo sabían, pues habían sacado el agua, y entonces llamó al novio y le dijo:
-- Todo el mundo pone primero el vino bueno y cuando ya están bebidos, el peor; tú en cambio has guardado el vino bueno hasta ahora.
Así, en Caná de Galilea Jesús comenzó sus signos, manifestó su gloria y creció la fe de sus discípulos en él.


Nota.

Boda y banquete …Fiesta, alegría!!!!


La presencia de Dios en el mundo, debe siempre significar alegría para el cristiano.
Los símbolos de la boda y del banquete en el evangelio de Juan, quieren mostrar la cercanía de Dios en la historia humana, la presencia del Reino en medio de nosotros. Nada más cercano a los seres humanos que las celebraciones, nada más cercano a nosotros que Jesús.

Reconocer la presencia de Jesús en medio de nosotros, en nuestra cotidianidad, en la historia personal y comunitaria; será siempre un desafío para el ser humano creyente. Sin embargo, Él siempre está a nuestro lado, dando sabor y buen gusto a nuestra vida.

Las bodas de Caná y la insitencia del escritor sagrado en las tinajas vacías y luego llenas del buen vino; son la señal del amor de Dios y del nuevo rumbo de la humanidad con la venida de Jesús. Los ritos y medios para encontrarse con Dios, estaban vacíos de sentido, cargados de muchas normas deshumanizantes…
El vino nuevo y bueno traido por Jesús, es el surgimiento de un nuevo rumbo para la humanidad, hoy para cada lector; que cobra todo su sentido, cada vez que Jesús es fuente de toda inspiración, motivación y fuerza para todo aquél que quiera descubrirlo vivo en cada ser humano, en la historia; aún en aquella dolorosa del pueblo Haitiano, al que nos unimos en oración para que finalmente pueda vivir como verdadero hijo de Dios.
No permitamos que los ritos y signos con los que expresamos nuestra fe, nuestra relación con Dios, pierdan su sentido. Que de verdad expresen lo que vivimos en nuestro corazón.
Amílcar Ferro B. mxy